¿Qué es un Ecce Homo?
Un Ecce Homo es una representación artística de Jesucristo coronado de espinas y con el rostro ensangrentado, justo antes de ser crucificado.
El nombre proviene de las palabras que pronunció Poncio Pilato al presentarlo ante el pueblo: «Ecce Homo» (He aquí el hombre).
Los Ecce Homo son muy comunes en el arte religioso, especialmente en la pintura y la escultura, y se han realizado desde la Edad Media hasta la actualidad.
Algunos de los más famosos son los de El Greco, Velázquez, Caravaggio o Antonio Ciseri.
¿Por qué hay tantos Ecce Homo en Jaén?
La provincia de Jaén tiene una gran tradición cofrade y una rica herencia artística, que se refleja en sus numerosas iglesias, conventos, ermitas y capillas.
Entre las obras que se conservan en estos lugares, hay muchas imágenes de Ecce Homo, que se veneran y procesionan durante la Semana Santa.
Sin embargo, no todos los Ecce Homo de Jaén son obras maestras ni están en perfecto estado de conservación.
Algunos han sufrido el paso del tiempo, el deterioro ambiental, los ataques vandálicos o las restauraciones poco profesionales.
Estos últimos son los que han llamado la atención de los medios de comunicación y las redes sociales, que los han comparado con el famoso caso del Ecce Homo de Borja.
¿Qué pasó con el Ecce Homo de Borja?
El Ecce Homo de Borja es una pintura mural realizada en el siglo XIX por el artista Elías García Martínez en el Santuario de Misericordia, situado a 5 km del centro de Borja (Zaragoza).
La obra representa a Jesús con la corona de espinas y una túnica blanca.

En 2012, la pintura estaba muy deteriorada y una vecina del pueblo, Cecilia Giménez, de 81 años y aficionada al arte, quiso restaurarla por su cuenta, sin contar con los conocimientos técnicos ni el permiso necesario.
El resultado fue desastroso: la cara de Jesús quedó irreconocible, con rasgos borrosos y deformes, y la túnica blanca se convirtió en un manto marrón.
La noticia se hizo viral y el Ecce Homo de Borja se convirtió en el protagonista de todo tipo de memes, bromas y parodias en internet.
Se le apodó como el «Ecce mono» o el «Ecce potato» y se le atribuyeron frases como «kill me please» o «behold the manatee».
El caso tuvo tanta repercusión que incluso se hizo un musical sobre él.
Pero no todo fue negativo: el Ecce Homo de Borja también generó un gran interés turístico y cultural.
Desde 2012, casi 200.000 visitantes han acudido a ver la obra de Cecilia Giménez, que ha sido reconocida como una artista naïf y ha expuesto sus otras pinturas en varias galerías.
Además, los beneficios obtenidos por las entradas al santuario se han destinado a fines sociales y a la conservación del patrimonio.
Aquí tienes el más conocido en Jaén, de cómo NO se debe restaurar.
El Sansón de Baeza
El Sansón de Baeza es una escultura de piedra que representa al héroe bíblico Sansón luchando contra un león.

Se encuentra en la fachada norte de la catedral de Baeza, una joya del Renacimiento declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
La obra data del siglo XVI y se atribuye al escultor Pedro de Orea, discípulo de Alonso Berruguete.
¿Qué le ha pasado al Sansón de Baeza?
El Sansón de Baeza ha sido sometido a una restauración que ha alterado por completo su aspecto original.
Según la noticia, difundida por El País, la intervención se realizó por parte de una empresa contratada por el cabildo catedralicio, sin contar con el permiso ni la supervisión de la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía.
El resultado ha sido una escultura con un aspecto más liso y pulido, que ha perdido gran parte de su relieve y su expresividad.
Además, se han añadido detalles que no estaban en la obra original, como los ojos del león o los dientes del héroe. El color también ha cambiado, pasando de un tono grisáceo a uno más claro y uniforme.
¿Qué otros Ecce Homo hay en España?
El caso del Ecce Homo de Borja no es el único que ha generado polémica y curiosidad en España.
En los últimos años se han descubierto otros ejemplos de restauraciones fallidas o inexpertas de obras de arte religiosas, que han sido bautizadas como «Ecce Homo» por su similitud con el caso original.
Aquí tienes una tabla con algunos de ellos:
Obra | Lugar | Fecha | Restaurador | Características |
---|---|---|---|---|
Tallas del siglo XV y XVI | Ermita de Rañadoiro (Asturias) | 2018 | Una vecina del pueblo | Pintó encima de las figuras con colores chillones y sin respetar los rasgos originales |
San Jorge del siglo XVI | Iglesia de San Miguel (Estella, Navarra) | 2018 | Una empresa de manualidades | Repintó la talla de madera con una capa gruesa y uniforme de pintura, eliminando los detalles y la expresión de la cara y el caballo |
Sansón y la Virgen del siglo XVI | Catedral de Baeza (Jaén) | Desconocida | Desconocido | Pintó encima de los personajes del púlpito con trazos simples y esquemáticos, convirtiéndolos en monigotes |
San Miguel Arcángel del siglo XVII | Ermita del Humilladero (Peñaranda de Bracamonte, Salamanca) | 2016 | Una vecina del pueblo | Pintó la cara del santo con un tono rosado y le añadió pestañas, cejas y labios rojos |
¿Por qué hay tantos casos de malas restauraciones?
Porque muchas veces se trata de obras antiguas y deterioradas, que requieren una intervención profesional y especializada.
Sin embargo, algunas personas sin formación ni experiencia se atreven a restaurarlas por su cuenta, sin seguir los criterios técnicos ni artísticos adecuados.
¿Qué consecuencias tiene restaurar mal un Ecce Homo?
Restaurar mal un Ecce Homo o cualquier otra obra de arte tiene consecuencias negativas tanto para el patrimonio como para la cultura.
Algunas de ellas son:
- Se pierde el valor histórico, artístico y religioso de la obra original, que queda alterada o destruida irreversiblemente.
- Se incumple la legislación vigente sobre protección y conservación del patrimonio, que establece unos requisitos y unas normas para realizar cualquier intervención sobre las obras de arte.
- Se daña la imagen y la reputación de los profesionales de la restauración, que ven desprestigiada su labor y su formación por culpa de actuaciones irresponsables o inexpertas.
- Se genera una falsa expectativa de beneficio económico o mediático, que puede incentivar a otras personas a realizar restauraciones sin criterio ni control.
¿Qué se puede hacer para evitar restaurar mal un Ecce Homo?
Para evitar restaurar mal un Ecce Homo o cualquier otra obra de arte, se pueden seguir estas recomendaciones:
- No intervenir nunca sobre una obra de arte sin tener los conocimientos técnicos, la formación académica y la experiencia profesional necesarios.
- No actuar por cuenta propia ni sin el permiso de las autoridades competentes, que son las que tienen la potestad para autorizar o denegar cualquier restauración sobre el patrimonio.
- No utilizar materiales ni técnicas inadecuados o dañinos para la obra de arte, que puedan alterar su composición, su estructura o su aspecto.
- No modificar ni añadir elementos que no correspondan con el estilo, la época o la intención del autor original de la obra de arte.
- No dejarse llevar por modas, gustos personales o criterios subjetivos a la hora de restaurar una obra de arte, sino respetar siempre su esencia y su valor.